El presidente español, Pedro Sánchez, se reunió en Pekín con el presidente chino, Xi Jinping, para abordar la guerra entre Rusia y Ucrania y el plan de paz presentado por el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski. Durante la reunión, Sánchez defendió la necesidad de una paz justa y duradera que respete los principios del orden internacional, incluyendo la soberanía e integridad territorial del país agredido, tal y como reclama el plan de Zelenski.
En respuesta, Xi evitó referirse explícitamente al conflicto en Ucrania y sólo hizo mención a los efectos de las turbulencias internacionales, destacando el éxito de España en la lucha contra la pandemia. En la rueda de prensa posterior, Sánchez no reveló la respuesta de Xi y subrayó la posición clara y rotunda de España en este conflicto, así como el intento de Moscú de debilitar el proyecto de paz de la Unión Europea.
Sánchez también valoró positivamente el plan propuesto por Xi para poner fin al conflicto y destacó su rechazo al uso del armamento nuclear y el respeto a la integridad territorial. La reunión entre ambos mandatarios tuvo una duración de unos 45 minutos y se produjo después del anuncio de China de una mayor colaboración militar con Rusia.
Este encuentro se produce después de la visita de Xi a Moscú, donde se reunió con Putin para tratar de erigirse como mediador en la guerra de Ucrania. China ha presentado un plan de paz en este conflicto que ha sido valorado positivamente por Sánchez.