Periodista exhorta a colegas continuar denunciando las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua
Emiliano Chamorro Mendieta
El periodista Eduardo Montenegro, director y propietario de NotimaTV, en Matagalpa, abandonó Nicaragua, ante el constante asedio que era objeto por parte de la policía del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
«Tuve que abandonar el país antes de terminar en la cárcel, pues desde hace tiempo me venían asediando, amenazando, igualmente a mis reporteros», confirmó Montenegro a la plataforma digital Portavoz Ciudadano.
La Policía de Daniel Ortega se ha convertido en el órgano más agresor en contra de los periodistas, ciudadanos y opositores al régimen Oscar Navarrete/ LA PRENSA.El periodista expresó que desde el exilio continuará denunciando las violaciones a los derechos humanos que suceden en Nicaragua y exhortó a los periodistas continuar sus labores con valentía y responsabilidad.
En Nicaragua entró en vigencia este miércoles la Ley Especial de Ciberdelitos que de acuerdo a especialistas pretende imponer un bozal a los periodistas independientes y a la misma ciudadanía que rechaza al régimen en el poder desde el 2007.
«No hay que temerle a este régimen, nuestra obligación es continuar denunciando los atropellos y violaciones a los derechos humanos. Sin embargo, ante esta Ley de ciberdelitos, con la cual el régimen pretende callarnos, debemos continuar siendo responsables, verificando la información para no darle lugar al régimen que nos pretenda aplica el bozal ya que este es el verdadero objetivo de esa ley», exhortó Montenegro a los periodistas en Nicaragua.
Las violaciones contra la libertad de prensa en Nicaragua han aumentado, de acuerdo a la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, este año se contabilizan más de 310 violaciones, contra periodistas y medios de comunicación.
Desde el 2018, cuando la ciudadanía autoconvocado salió a las calles, el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo, han impuesto un sistema policial en Nicaragua, el cual se hace acompañar de paramilitarismo