En Nicaragua el regimen Ortega-Murillo no permite visitas de familiares ni sacerdotes a presos politicos
Emiliano Chamorro Mendieta
Los más de 130 presos politicos en Nicaragua no solamente están secuestrados tras los barrotes por el regimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo sino que tambien se les ha impedido la communion espiritual a la cual la Iglesia, sea esta de cualquier confesión religiosa, esta facultada espiritual y moralmente asistirlos, sumado a que tambien es un derecho que les otorga la ley.
De acuerdo a los principios y proteccion establecido por la Comision Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH): las personas privadas de libertad tienen derecho a la libertad de conciencia y religión, que incluye, el derecho de profesar, manifestar, practicar, conservar y cambiar su religión, según sus creencias; el derecho de participar en actividades religiosas y espirituales: y ejercer sus prácticas tradicionales; así como el derecho de recibir visitas de sus representantes religiosos o espirituales.
La abogada Martha Patricia Molina, experta en temas religiosos, Estado de Derecho y Democracia explico al diario digital Portavoz Ciudadano que la Ley del Régimen Penitenciario y Ejecución de la Pena, Ley 473 faculta a la iglesia, «sea católica o de otra denominación a brindar asistencia espiritual a los privados de libertad, en este caso los sacerdotes o ministros evangélicos tienen acceso a los centros penitenciarios para comunicarse con los más de 130 presos políticos y brindarles apoyo espiritual, moral y confesarlos, darle la comunión, la unción de los enfermos. Tengo entendido que el doctor Jose Pallais (preso politico) está enfermo y el requiere de estos sacramentos», explico Molina.
La tambien activista de derechos humanos, lamento que el regimen Ortega-Murillo que tanto pregona la paz y la reconciliacion violen hasta el derecho de confesión «de los secuestrados politicos».
«Los derechos de los presos politicos esta siendo vulnerado desde el momento de su detencion. Todos los derechos y garantías constitucionales de los detenidos están siendo vulnerados por la administración pública del señor Ortega,», agrega la abogada.
La experta sostiene ademas que «desde este preciso momento cambia su estatus de detenido a secuestrado. Por que una persona detenida tiene derechos y deberes consagrados en la Constitución Política de Nicaragua, las leyes internas y demás instrumentos jurídicos internacionales en materia de derechos humanos. Un secuestrado está a merced de su opresor y su vida depende de lo que establece el tirano y este es el caso de lo más de 130 secuestrados políticos al cual el regimen ha impedido que hasta sus familiares los visiten», observo Molina.
LA IGLESIA SIN ACCESO A PRESOS POLITICOS
Pese a que la iglesia católica y evangelica en Nicaragua, las religiones mas predominantes en la población tienen penitenciaria en las carceles, tambien se les impide realizar su labor misionera y espiritual con los presos politicos, relato en el anonimato un sacerdote.
«La asistencia espiritual a los presos politicos esta en varios versiculos de la Biblia y por supuesto que tambien es un derecho que brindan las leyes en Nicaragua, pero en realidad, no tenemos acceso a ese derecho como sacerdotes», aseguro el religioso a Portavoz Ciudadano.
Para la abogada Molina, la negativa de la dictadura contra los reos politicos es sencillamente violatoria a toda norma juridica y de derechos humanos.
«Desafortunadamente la administración pública de don Daniel Ortega es tan visceral que ha sido incapaz de autorizar permiso de salida a presos políticos cuando sus familiares han fallecido y eso que la ley se los permite. Están facultados», denuncio Molina.
En Nicargua al menos 130 personas, entre opositores politicos, empresarios, activistas de derechos humanos, estudiantes y periodistas se encuentran privados de libertad por exigir democracia y Estado de Derecho en el pais.
