Japón en respuesta al lanzamiento de un misil balístico intercontintental por parte de Corea del Norte este sábado. Los aviones han volado en formación sobre el mar Amarillo, el mar Oriental –de Japón– y la región sur de Corea del Sur.
«El entrenamiento ha demostrado en esta ocasión la capacidad defensiva combinada de Corea del Sur y Estados Unidos y la fuerza abrumadora de la alianza, así como el despliegue inmediato de activos de disuasión ampliados en la península de Corea»,ha destacado Seúl.
Estas maniobras demuestran además el «férreo» apoyo de Estados Unidos a la defensa de la península y su compromiso de disuasión ampliado, un término empleado para referirse a la amenaza del uso de toda la fuerza militar estadounidense, incluida la nuclear, para defender a Corea del Sur.
El lanzamiento ha sido, según KCNA, una «prueba real» de los esfuerzos constantes de la «fuerza nuclear estratégica» de Corea del Norte para convertir «su capacidad de contraataque nuclear fatal contra las fuerzas hostiles en una fuerza irresistible, así como una garantía y una prueba clara de la segura fiabilidad de su capacidad nuclear disuasoria».