El Departamento de Estado de Estados Unidos informó que está monitoreando las maniobras militares de China en torno a Taiwán y emplazó al país asiático a actuar con “moderación”. Un portavoz del departamento dijo que los canales de comunicación con China siguen abiertos y que se ha pedido constantemente moderación y que no haya ningún cambio en el ‘statu quo’.
Los ejercicios militares fueron desplegados en respuesta a la reunión entre la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, y el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy. El Ejército chino definió las maniobras como una “seria advertencia” contra “la provocación de las fuerzas separatistas” y una “acción necesaria para proteger la soberanía nacional y la integridad territorial” de China.
La situación recuerda a la ocurrida en agosto de 2022, cuando la visita a Taiwán de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, enfureció a Pekín, que respondió con maniobras militares alrededor de la isla a un viaje que describió como “farsa” y “traición deplorable”.
La isla de Taiwán, que Pekín considera una provincia rebelde, es uno de los mayores motivos de conflicto entre China y Estados Unidos, debido sobre todo a que Washington es el principal suministrador de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de conflicto bélico. Estados Unidos suscribe desde 1979 la política de “una sola China”, pero mantiene estrechas relaciones no oficiales con Taiwán pese a que no reconoce su independencia.
El Gobierno de Joe Biden confía en que cuenta con los recursos y capacidades suficientes para garantizar la paz y la estabilidad en la región, pero advirtió que cuenta con las “capacidades” para garantizar la seguridad de la isla. El paso de la presidenta taiwanesa por Estados Unidos fue una “escala” y no hay motivo alguno para que Pekín “reaccione de forma exagerada”, dijo el portavoz del Departamento de Estado.