La situación tan difícil que está pasando el periodismo independiente en Nicaragua tanto en lo económico, como en seguridad física y jurídica, ha llevado a muchos comunicadores a incursionar en otras áreas ajenas a su preparación profesional para poder suplir sus gastos básicos.
Este es el caso del periodista de Masaya Francisco Jarquín, quien desde hace unos meses decidió emprender junto a un amigo, un pequeño negocio de venta de comida desde su casa de habitación. Actualmente ha logrado reunir a un equipo de cinco personas, de las cuales está al frente y agradece a Dios porque la gente ha “probado su cuchara” y ha recibido bien su iniciativa culinaria.
Para este profesional de la comunicación incursionar en estas labores no ha sido tan difícil, pues cuenta que desde pequeño ayudaba a su mamá en un negocio de fritanga que ella tenía y que era toda una referencia en el barrio San Juan de Masaya. Pero, lamentablemente dejó de funcionar a raíz de su muerte hace unos años. Después de tantas adversidades, Jarquín logró culminar su carrera en Comunicación, y al no encontrar trabajo, ahora es propietario de la comidería llamada “Indio Viejo» en la ciudad de Las Flores.
“El 12 de noviembre del año pasado empezamos con este proyecto del “Indio Viejo» y ha sido bastante gratificante seguir creciendo al lado de nuestros clientes, quienes nos han dado ideas para ir implementando nuevos platos a nuestro menú”, cuenta Jarquín.
“Al iniciar un negocio siempre existe el temor de que si en tu primer día vas a vender o no, pero gracias a Dios con la pagina que tengo en Facebook que se llama en Directo Digital, la gente comenzó a realizar sus pedidos desde el día uno, además, siempre hemos tenido el negocio abierto al público y también ofrecemos servicios delivery. En el negocio de la comida lo difícil es que los productos siempre están en aumento, por ejemplo vas al mercado y un día encuentras la docena de tomate en 40 córdobas y al día siguiente lo encuentras en 60. De modo que mantener los precios estables se vuelve un poco difícil. Sin embargo, tenemos diferentes precios de los platillos desde 90, 100 y 120 córdobas”, detalla el periodista.
“Uno de los proyectos que tenemos a corto plazo es implementar el servicio de desayuno. El éxito que tengo de trabajar con este equipo es que todos somos responsables, desde la persona que nos colabora en la limpieza hasta los de la cocina. Es un equipo muy comprometido y puntual y eso nos ha beneficiado como negocio. Ha sido una gran experiencia emprender en algo diferente a lo que vos estudiaste, porque cuando uno va a la universidad se sueña con implementar tus conocimientos en la carrera que estudiantes, pero hay que estar conscientes también de la situación en la que estamos como país, hay que abrirse nuevas puertas y estar dispuestos a caminar por otros caminos tanto en lo profesional como en los negocios. Creo que emprender si es difícil, pero uno tiene que ir enfocado en lo que quiere a futuro”, recalcó Jarquín.
